viernes, 14 de octubre de 2011

Capítulo 12.

Nos miramos sin decir nada. Dicen que después de la tormenta viene la calma, pero yo habría deseado que la tormenta jamás hubiera llegado. No me podía arrepentir de haberlo conocido, porque era imposible; pero sí me arrepentía de haberme enamorado de él. Era demasiado duro. Me alejé y entré en el salón. Niall se quedó allí de pie, mirándome, y se apoyó en la puerta, esperando a que se le ocurriera algo para decirme. Yo miraba al suelo, pensando qué me había pasado la noche anterior para hacer eso, y qué les había pasado a él, a Zayn y a Audrey. Lo que hace el alcohol... Poco a poco todos se fueron despertando. Primero Kelly, la cual se quejaba del dolor de cabeza y el muscular. Cuando me vio en el otro sillón individual ya despierta, me habló.
- Ey, Cathy - se incorporó como pudo para ponerse de pie, con una mano en la frente.- ¿También has dormido aquí?
- No... - miré a la puerta, por lo que ella lo hizo también.
Cuando vio a Niall, rápidamente alejó la mirada de allí y se dedicó a despertar a Zayn primero y luego a los demás.
- Zayn... vamos - le agitaba el hombro con suavidad hasta que se despertó.
- Oh... ¡ay! Bueno días.
Se veía que todos estábamos para el arrastre.
Fue despertando a Taylor, a Harry, a Chloe y a Louis, y Audrey también apareció por allí de nuevo, esquivando a Niall. Pero éste la detuvo agarrándole del brazo.
- ¿Podemos hablar un momento?
Le oí decir. Audrey asintió con la cabeza y se fueron de allí. Yo ya estaba harta de todo aquello, por lo que cogí mi bolso que había dejado por la noche tirado en una esquina del salón y me fui de su habitación para ir a la nuestra. Con suerte, no habría perdido la llave. Lo comprobé antes de salir. Todo estaba bien, así que me fui para poder pensar con claridad y tranquila.

~~Narrador: Audrey~~
Niall me llevó al dormitorio para charlar. Me invitó a sentarme junto a él en la cama, y después de unos segundos habló:
- Audrey, bueno... sabes lo que pasó anoche... Lo sabes tú y también lo sé yo.
- Sí...
- Pero para mi no significó nada, y espero que para ti tampoco.
- No, en absoluto. Ninguno sabíamos lo que hacíamos, llevábamos demasiado alcohol encima - reí y él me siguió.
- Esto quería decírtelo porque... a mi me gusta Cathy. Yo se lo he dicho a ella, pero sé que no sería fácil estar juntos porque la distancia nunca es una buena compañera, y en algún momento vosotras os tendréis que ir de Londres, nosotros viajaremos, haremos giras... lo típico para alguien como nosotros.
- ¿Ella esto ya lo sabe, dices?
- Sí.
- ¿Y cómo se lo tomó cuando se lo contaste? - fruncí el ceño.
- Me dijo que podríamos ser amigos, que por ella no había problema. Pero noté algo en su cara que no me convenció, aunque en ese momento no quise decirle nada...
- Oh - me golpee la frente con la mano derecha.- Cuando Cathy dice "no hay problema" es porque lo hay.
- ¿Qué? - Niall parecía confuso.
- Si Cath te ha dicho eso es porque tú le gustas, y mucho. Bueno, eso yo ya lo sabía... En realidad, no sólo le gustas.
- ¿Ah, no? - se le comenzó a dibujar una pequeña sonrisa en la cara.
- ¿No te has dado cuenta aún, Niall? Está enamorada de ti.
- ¿Eso te lo ha dicho ella? - sus profundos ojos azules se habían abierto como platos y no podía pestañear.
- No me lo ha dicho, pero soy su amiga desde hace mucho tiempo, la conozco muy bien. Cómo te mira... es especial.
- ¿Crees que debería hablar con ella?
- Yo creo que sí. Espero que sigas mi consejo, ¡vamos corre a por ella! ¿A qué esperas?
- ¡Allá voy! - sonrió y se levantó de un salto, corriendo hacia el salón.
Yo me levanté y le seguí, riéndome de su entusiasmo.
- Eh... chicos, ¿dónde está Cathy? - preguntó Niall.
Kelly se giró de repente hacia él. Todos estaban charlando aún sobre lo que se acordaban de anoche. Algunos se  veían arrepentidos, pero no paraban de reírse.
- Creo que se ha ido... - le contestó.
- ¿Qué? ¡¿Adónde?!
- No lo sé. Simplemente cogió su bolso y salió por la puerta.
- Oh, genial - Niall se lamentaba.
Empezó a correr y se paró en frente de mi.
- Aud, ¿me dejas tu llave? Por si acaso se ha ido a vuestra habitación...
- ¡Claro! - rebusqué en los bolsillos de mi chaqueta, la cual estaba colgada en una silla, y después de un largo minuto la encontré- Aquí tienes, Niall.
- ¡Muchas gracias!
La cogió y salió despavorido de la habitación.

~~Narrador: Cathy~~
Las lágrimas caían por mis mejillas. ¿Le acabaría gustando Audrey? No podía ni pensarlo. Era algo que me dolía demasiado. Niall me había dicho que yo le gustaba pero no quería estar conmigo por la distancia. Sí, ya. Lo que pasaba era que quería complacer a una fan más. Si de verdad le gustara, por lo menos habría habido algo... no sé... ¿un beso? ¿un abrazo, por lo menos? Pero después de hablar, simplemente nos fuimos tan tranquilos de nuevo.
De repente, oí el ruido de unas llaves y levanté la cabeza hacia la puerta. Pero, para mi sorpresa, era un chico.
- ¡Niall! ¿De dónde has sacado la llave? ¿Y qué haces aquí? - mi cara era de disgusto y rabia a la vez.
- Me la ha dejado Audrey. Quería venir a hablar contigo... - dejó la llave en una de las mesillas de noche y se sentó a mi lado.
- ¿Qué me tienes que decir? - yo ni siquiera le miraba a la cara.
- ¿Recuerdas cuando te dije que me gustabas pero me parecía... mala idea, por así decirlo, estar contigo? - su tono de voz era de arrepentimiento, no había duda.
- Sí... me acuerdo.
- He estado pensando... ¿por qué la distancia tiene que ser un problema? - le miré sorprendida, pero tratando no cambiar la expresión de mi rostro.- A ver, de momento estamos juntos, ¿no? Tú no te has ido, yo tampoco... Podemos intentar... eso.
Me había quedado sin palabras. ¿Iba en serio? ¿Realmente iba en serio? No... no, no podía ser. ¿Qué? Eso era demasiado impresionante.
- ¿De verdad? - me animé a preguntarle.- Bueno, entre tú y Audrey... a ver, pensé que podía pasar algo... Vi cómo la llamabas antes. Es cierto que porque haya pasado lo que pasó a mi no me gusta Zayn, y supongo que yo a él tampoco. Pero bueno, creo qu... - no me dejó terminar.
Nuestros labios se juntaron en una explosión. Esa fue la sensación que tuve por dentro. Un gran fuego se encendió y no pude reaccionar. Simplemente me dejé llevar hasta que él paró.
- Tenía que hacerlo, no te callabas... - sonrió a escasos milímetros de mi cara.
- Cuando me dan cuerda no puedo parar - me encogí de hombros y me resigné a reír. Se me había pasado toda la rabia y pena de repente.
- ¿Ah sí? ¿Y qué pasa si te doy cuerda ahora? - me guiñó un ojo y sonrió.
- Hm... prueba a ver, ni yo lo sé...
Rió y se volvió a acercar, enlazando sus dedos con mi pelo. Esa vez, nuestros labios encajaban perfectamente. Yo tenía ganas de él, de sentirlo. Al fin mis sueños se habían cumplido.


2 comentarios:

  1. Me ENCANTA!!!!
    Sigue así!
    Saludos,
    http://amartearabiarellibro.blogspot.com

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  2. Adoro la parte que Niall la besa para que Cathy calle...
    Resumo: Adoro tu novela y me has enganchado (:

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