~~Narrador: Cathy~~
Cuando salimos de la cabina, Harry colocó un brazo sobre mis hombros. Sabía como hacerme sentir reconfortada. En un acto reflejo, mientras caminábamos lejos de la gente, le besé la mejilla. Él sonrió y besó la parte alta de mi cabeza.
- Vamos a hacer una cosa - dijo parándose de repente.- Llámale.
- ¿Que le llame? ¿Ahora? No, no puedo.
- ¿Cómo que no puedes?
- Que no, Harry...
- Que le llames.
- No. En serio, no puedo. No me saldrían las palabras.
Él suspiró y siguió caminando. Yo le seguí un poco por detrás.
- No entiendo por qué eres tan cabezota. Allí arriba me dijiste que irías a por él - dijo sin mirarme.
- Lo sé, pero por teléfono... me resultaría raro.
- ¿Vamos al hotel? Quizás ha vuelto.
- Vale...
Se notaba la tristeza en mi voz. Estaba a punto de llorar otra vez, pero reprimí las lágrimas y me las guardé para mí sola. Harry me esperó y me volvió a rodear con su brazo.
- Venga, que no estás sola. Vamos.
Anduvimos en silencio hasta llegar al hotel, ya que ninguno de nosotros tenía demasiado que decir.
~~Narrador: Niall~~
Después de una hora, sonó la puerta. Me levanté con pereza y aún tristeza y abrí la puerta.
- ¡Hey, Niall!
- Oh, eres tú.
- Kelly me ha dicho que querías hablar conmigo.
- Ah, sí, cierto. Vamos afuera.
Salimos juntos al pasillo y yo suspiré. Me resultaba un poco difícil contarle esto.
- Verás... es que... Harry y Cathy se están viendo más de lo que deberían.
- ¿Qué quieres decir con eso?
- Pues que se están acercando demasiado. Llámame paranoico, pero yo creo que tienen algo.
- ¿De verdad lo crees?
- Sí. Liam me ha contado que esta mañana Harry ha salido a ver a Cathy, de lo que deduzco que ella había salido primero sola, claro.
- Pero... ¿a dónde han ido?
- Ni idea...
- Voy a ir a buscarlos. ¿Estás conmigo?
Después de quedarme pensando unos segundos, sonreí y asentí. Corrí escaleras abajo y salí rápidamente del hotel, asegurándome que Taylor estaba conmigo.
Anduve con rapidez, pero sin llegar a correr.
- Tenemos que encontrarlos, no puedo vivir con la idea de que Harry me deje por mi mejor amiga...
- Digo exactamente lo mismo. No sabes lo que me está doliendo todo ésto... ¡Y la culpa de todo es mía!
- No, no es tuya. En realidad, yo no debería de habérselo dicho a nadie... Harry confió en mí.
- Venga, dejemos el tema - dije acercándola a mí.- Concentrémonos en buscarles.
- Vale - sonrió mirando al suelo.
Anduvimos durante más o menos media hora a un buen ritmo, incluso corrimos en algunos tramos del camino. Ya no podía más, necesitaba abrazar a Cathy otra vez. Llevábamos poco tiempo enfadados, pero para mí parecían años.
No había mucha gente. Los rayos del sol de la mañana golpeaban mis ojos de vez en cuando, lo que era bastante molesto. Pero una pequeña capa de niebla también se mantenía presente. Mientras tapaba mis ojos del sol, veía dos figuras acercándose a nosotros.
- Taylor...
- ¿Tú también lo ves?
- Creo que sí.
Eran Harry y Cathy, no había ninguna duda. La silueta de Cathy era inconfundible, conocía una a una las curvas de su cuerpo de todas las veces que me había quedado mirándolas fijamente. Y el pelo de Harry, junto a su postura, le habían delatado.
- ¿Qué hacemos? - preguntó Taylor, indecisa.
- La verdad, no lo sé... Esperemos a ver si nos ven.
Nos quedamos mirando hacia ellos. Yo no podía apartar la mirada de Cathy; estaba deseando abrazarla, besarla, y al fin decirle "lo siento" y que me perdonara. Me sentía un idiota, porque no podía hacerlo. Algo en mí me lo impedía.
~~Narrador: Cathy~~
- Harry, mira allí - dije haciendo un movimiento con la cabeza hacia delante.
- ¿Qué pasa? - dijo inclinando su cabeza.
- Son Niall y Taylor.
- ¿Qué dices? - abrió mucho los ojos y se fijó más, con interés.- Pues ahora que lo dices sí que lo parecen.
- ¿Qué coño están haciendo juntos, eh? ¿Qué pretenden?
- Tranquila, seguro que es para ponerte celosa. Relájate y respira. Tienes que hablar con Niall, Cath.
- Lo sé, lo sé. Pero no puedo controlarme, Harry. ¿A ti no te importa nada?
- Sé que Taylor me sigue queriendo, igual que yo a ella. No tengo que preocuparme, y tú tampoco.
Seguíamos andando y cada vez estábamos más cerca de ellos. No sabía si dirigirme a Niall o no. Ya nos separaban pocos metros y su mirada se clavaba en la mía, la mía en la suya, y mi corazón latía con fuerza. Era evidente que estaba muy molesto conmigo. En un acto de estupidez, me giré y seguí por otra calle, para no tener que enfrentarme a aquel momento. Ni siquiera me fijé en si Harry me seguía o no; simplemente corrí imparable por las calles de Londres, deseando llegar al hotel sin ser vista por Niall ni por Taylor.
A la media hora, noté mucho cansancio. Miré atrás; Harry ya no me seguía. Normal. Yo no estaba acostumbrada a correr tanto tiempo a aquel ritmo, pero las ganas de escapar pudieron darme fuerzas. Al fin, vi a escasos metros el hotel. Ya era como mi hogar, así que hice un último esfuerzo y corrí adentro, hasta mi habitación. Las chicas no estaban, suponía que se habían ido a desayunar, o ya casi almorzar con la hora que era. Me tiré en la cama y pensé en la idiotez que había hecho. ¿Cómo era tan inútil? En esos momentos quería que la tierra me tragase, que nadie volviese a saber nada más de mí, ni siquiera yo misma. Olvidarme de todo. Incluso desee no haber conocido a One Direction. Sí, sonará raro, porque eran mis mayores ídolos hacía tan sólo unas semanas, pero ahora se había convertido en una pesadilla. Haber empezado una relación con Niall había sido quizás uno de los mayores errores de mi vida, porque ahora lo amaba, lo amaba como nunca antes había amado a nadie, y ya era imposible escaparme de él. Olvidarle ya no era una opción, porque seguiría en mi mente día tras día, a cada hora, a cada minuto, a cada segundo. Y si las cosas eran así, ¿por qué me empeñaba en escapar? ¿Por qué me empeñaba en no hablar con él, en lo volver a como eran las cosas antes? Si ya sabía que jamás conseguiría librarme de él, que el deseo de tenerle iba a seguir siempre presente, ¿por qué no le hablaba? ¿O por qué no simplemente corría hacia él y le abrazaba, y nunca volvía a soltar? Pues porque no era lo suficientemente inteligente para pensar con rapidez y no cometer una locura de la que posiblemente me fuera a arrepentir toda la vida. Lo único que necesitaba ahora, a mi lado, acostado conmigo, con sus brazos a mi alrededor, era a él. Al pozo sin fondo, al que comía y comía y no se hartaba, y sin embargo su cuerpo seguía atrayéndome como el primer día y se mantenía en plena forma. Al rubio de la banda, al de los ojos azules. A mi Niall Horan.
Sin... Palabras!!! me emocione tiaa te lo juroo aiiss eres increiblee!!!!
ResponderEliminarmas mas Quiero mas jjajajjaja
Muakk Lovee uu Lara!! ;)
Y yo ahora lloro y me deshidrato y me muero!
ResponderEliminarNo en serio, me has hecho llorar, me muerdo de ganas de leer el siguente, un besazo!
Uuuooo, me ha encantadoo! :3
ResponderEliminarakjdhfkadfkdf no tengo palabras.
Máaas ;D
Me encantaa es GENIAL, siguiienteeee queria comentarte que he empezado una novela de One direction si quieres pasarte ya tengo el primer capitulo http://stolemyhearttt.blogspot.com.es/ GRACIAS :)
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